María Cecilia Badillo

Jefe de edición

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Mis compañeros de universidad me conocen como la

persona más simple del mundo, pero a la vez con gracia

y dominante. Mi mejor amiga me describe como una loca,

positiva y persistente por lograr cualquier proyecto que se

me cruce por la mente. Mi madre, quien me conoce más, me

ve como una persona impaciente, juiciosa, inteligente, capaz,

dispuesta a dar más de lo necesario y con metas fijas y claras.

Tres perspectivas diferentes, una sola personalidad en un cuerpo

bumangués verdadero. Con cinco años de estudio para ser periodista,

pero no otra más del montón. Próximamente con un valor agregado

para mi fresco perfil profesional de Comunicadora social. Tengo la ansiedad, de un niño de tres años, de conocer el mundo. Soy una mortal capaz y dispuesta a aprender de las fuentes de conocimiento que están a mí alrededor. “Tenemos personalidades diferentes para cada círculo social. Esto no quiere decir que seamos hipócritas, ¿o sí?“, mis neuronas al momento de escribir mi autobiografía.